LENGUA CASTELLANA GRADO 9°
SEMANA 1 y 2
Carrusel: Socialización de Manual de convivencia
SEMANA 3 y 4
una descripción objetiva de los temas, hechos o sucesos acaecidos durante la sesión o reunión y, en segundo lugar, un texto escrito de registro que describe, de manera precisa, el desarrollo de los aspectos fundamentales de un trabajo realizado.
Un protocolo es más que un acta, es decir, va más allá de recapitular de manera cronológica y puntual cada uno de los sucesos ocurridos en un evento o reunión.
Un protocolo tampoco es un simple resumen; no se limita a presentar una síntesis global de un tema genérico. De igual manera, el protocolo no es un ensayo crítico sobre un determinado proceso de trabajo. Menos todavía, un protocolo consiste en una compilación de opiniones sueltas, expuestas a lo largo de una sesión, encuentro o seminario.
El protocolo, como instrumento de trabajo y seguimiento de un proceso, es importante porque permite, entre otras cosas:
a. Convertir las opiniones sueltas en enunciados con sentido.
b. Enterar a las personas ausente de un trabajo desarrollado durante algún tipo de sesión.
c. Concentrar la atención de los participantes hacia los temas prioritarios de una exposición, a la vez que dirigirla de manera consciente.
d. Reforzar el proceso de enseñanza – aprendizaje en tanto la reconstrucción de un proceso permite fijar con mayor fuerza campos de información.
e. Contar con una descripción narrada de primera mano que posibilita construir la memoria de un proceso y, al mismo tiempo registrar las decisiones fundamentales que se tomen en el curso de la discusión
f. Conocer las distintas formas y maneras como los participantes de un evento interpretan la experiencia, resaltando determinados hechos o enfatizando algunos puntos.
g. Identificar aquellos temas en los cuales el grupo logró una adecuada o inadecuada asimilación de los contenidos. De la misma manera, detectar cuáles temas, que eran importantes, pasaron desapercibidos por el grupo, o los vacíos que deben cubrirse en posteriores oportunidades. Y finalmente, evidenciar las zonas de consenso en torno a decisiones, asuntos o problemas.
Se puede utilizar cualquier estilo de redacción, pero insistiendo en la claridad, precisión y sencillez. Puede ayudarse de diagramas o esquemas aclaratorios.
Por su valor de registro, el protocolo debe tener una estructura lo suficientemente ágil y concreta como para que cualquier lector pueda enterarse, sin gran dificultad, de lo ocurrido durante el evento que se describe narrativamente.
Por lo mismo, es recomendable que un protocolo contenga las siguientes partes:
a. Una identificación de la situación: lugar geográfico, fecha, hora, objetivo o motivo del evento, participantes, duración, momentos de la sesión, etc.
b. Descripción de las actividades: si se hizo mediante una exposición o en trabajo en grupo, si fue utilizando un taller o una plenaria, o un grupo focal o una dinámica de observación, etc.
c. Temas tratados en orden de importancia: cuáles fueron las columnas vertebrales de la discusión, cuáles las líneas – fuerza que soportaron el desarrollo del evento. Aquí es donde el trabajo de escritura es de suma importancia, pues no se trata de enumerar los temas, sino de desarrollarlos narrativamente.
d. Decisiones o acuerdos fundamentales a que se llegaron: pueden referirse al inmediato o largo plazo, pueden haber surgido durante el desarrollo del evento y no siempre al final; pueden no haberse evidenciado como decisiones de manera explícita por lo cual, hay que inferirlas.
e. Tareas asignadas, compromisos establecidos, responsables: es el puente de conexión entre uno y otro evento o entre sesiones. Pueden consistir en: lecturas asignadas, trabajos por realizar, ejercicios formales y no formalizados, productos de diversa índole, etc. Es la clave registrar la importancia de la tarea dentro del proceso, y si hay responsables directos o si es una responsabilidad grupal.
De los protocolos académicos se aprenden dos cuestiones fundamentales.
Primero, se aprende a discutir, a distinguir entre la mera opinión y el real aporte. Se comprende que una intervención sólo constituye un aporte real a una discusión si beneficia a todos y si aumenta el conocimiento de todos sobre un tema. Muchas veces pensamos que lo importante en una discusión es opinar; después de haber intentado protocolar discusiones convertidas en “simples discusiones” aprendemos que lo importante es aportar y construir en colectivo, respetando la diferencia.
Segundo, se aprende a resumir una discusión, resaltando el avance del conocimiento grupal acerca de un cierto tema. Esto significa que se aprende a escuchar atentamente, buscando lo que une a todos los participantes en la discusión, incluso a través de sus divergencias. Se aprende a ir más allá de las intervenciones individuales y a reconocer los caminos de la discusión, los puntos de partida, las ramificaciones y los puntos de llegada.
PARTES DEL PROTOCOLO
CABECERA DEL PROTOCOLO: Evento (organizador), Fecha, Lugar y Duración. Número de protocolo.
DESARROLLO DEL TEMA: temas vistos, aportes importantes, socializaciones relevantes, actividades realizadas. Conclusiones…
COMPROMISOS: Si hay tareas asignadas y quiénes son los responsables.
FIN DEL PROTOCOLO: Firma del autor del Protocolo Función del protocolo en el ámbito del aprendizaje.
El protocolo es el momento de explicitar los procesos, es una oportunidad de hacer sugerencias sobre el contenido. Ese proceso que sensibilizó a alguien, se expresa.
Es un punto de partida, uno de esos criterios es el de selectividad, consignamos eventos, experiencias, pensamientos que son significativos y que tienen una importancia especial.
Esa selección de lo que es más importante, no es arbitraria, tiene que tener alguna justificación. Por ejemplo, al momento de determinar la temática de la sesión, se debe recurrir al criterio de la selección. Allí se dicen cosas que parecen interesantes, pero que son comentarios al margen del propósito general de la reunión, porque se desvió la conversación hacia ese lado, porque alguien quiso hacer un paréntesis o porque ocurrió algo insólito que de golpe nos hizo pensar eso, aunque no fuera lo más relacionado con el tema.
Otro criterio está relacionado con lo personal como sujeto participante en el proceso.
Por ejemplo, para alguien fue muy interesante una lectura, sus características y temáticas, esto lo recogería en su protocolo. Pero para otra persona, lo importante fue el procedimiento del trabajo en grupo, ya que arrojó más luces e hizo que el aprendizaje tuviera más significado. Esta no significa que cuando se hace un protocolo, se tenga libertad para poner allí lo que se le ocurra al protocolando, pero sí se tiene una cierta libertad para dar una versión de los hechos y que en el momento de ponerse en común, se puede complementar con lo que se agregue.
Entonces cuando volvemos a leer el protocolo, podemos encontrar momentos que pueden volver a tener un valor significativo, en términos conceptuales e investigativos.
Esa es la naturaleza de los protocolos.
SEMANA 5 y 6
- Consiste en entender lo que el texto dice de manera explícita
- Consiste en comprender a partir de indicios que proporciona el texto
- Requiere un alto grado de abstracción por parte del lector
- Se construyen inferencias cuando se comprende por medio de relaciones y asociaciones el significado del texto
- Nivel crítico
- Consiste en evaluar el texto, ya sea su tema, personaje, mensaje, etc. Se evalúa críticamente el texto
Semana 5 y 6
¿Qué es un texto narrativo?
Un texto narrativo es aquel que relata una serie de hechos ocurridos a uno o varios personajes a través de un narrador (de ahí su nombre). Pueden ser de naturaleza ficticia o real. Por ejemplo, las novelas, cuentos o biografías.
Normalmente sigue una organización secuencial que consta de una introducción, un desarrollo y un final.
Y dependiendo de su duración, veracidad, cronología o presencia de elementos gráficos, un texto narrativo puede considerarse un cuento, novela, fábula, crónica, biografía o historieta.
Como hemos mencionado, el texto narrativo cuenta una historia (real o ficticia) a partir del punto de vista de un narrador, con unos personajes, espacio y tiempo determinados. Veamos los diferentes tipos de textos narrativos que existen:
Tipos de textos narrativos
- Cuento. Es una narración literaria corta y compuesta por pocos personajes. Cuenta con un único conflicto, que finalmente acaba con su desenlace.
- Novela. Es una narración literaria de mayor extensión y desarrollo que el cuento. Las novelas tienen un conflicto principal, pero también varios conflictos secundarios que se desarrollan y resuelven a lo largo del relato. Además, cuentan con un mayor número de personajes. Suelen estar divididas en capítulos.
- Historieta. Es una narración que combina texto con elementos gráficos. Suelen tener un personaje principal y varios secundarios. Se caracterizan por representar gráficamente aquello que está escrito.
- Chiste. Es una narración breve que utiliza recursos o juegos de palabras con el objetivo de entretener o hacer reír al lector.
- Diario de vida. Es una serie de relatos escritos por un autor en primera persona, que intenta expresar hechos o experiencias personales que desea registrar.
- Biografía. Es un texto que busca narrar la vida de una persona. Generalmente, se escriben biografías sobre personajes que resultan significativos dentro de la sociedad, por lo que resulta interesante dar a conocer su vida. Si la biografía es escrita por la persona de la que se trata la historia, se denomina autobiografía.
- Crónica. Es el relato cronológico de un acontecimiento. Los hechos se narran en el orden en que ocurrieron.
- Mito y leyenda. Son narraciones que mezclan hechos realePers y sobrenaturales y que explican un hecho en particular. Si bien originalmente se transmitían en forma oral, algunos autores recopilaron mitos y leyendas en narraciones escritas.
Tipos de narradores según la persona gramatical
Hay distintos tipos de narradores según qué persona gramatical se utiliza más. En algunos textos, estos narradores se pueden combinar.
- Narrador en primera persona (yo, nosotros). Se utiliza para narrar los hechos desde el punto de vista de un personaje, que puede ser o no protagonista. Es un narrador interno, porque forma parte de la historia contada.
- Narrador en segunda persona (tú, usted, ustedes). Dirige su discurso al lector, a un personaje o a sí mismo. Algunos textos pueden estar enteramente narrados en segunda persona o pueden combinar esta persona con la primera o con la tercera. Este tipo de narrador es el menos utilizado en textos literarios, y apela a la empatía del lector.
- Narrador en tercera persona (ella, él, ellas, ellos). Cuenta los hechos desde el punto de vista de una entidad que está por fuera de la historia. En algunos casos, este narrador puede tener una participación acotada en la trama.
Tipos de narradores según su conocimiento
Los narradores también se clasifican según el conocimiento o el nivel de cercanía que tienen sobre los hechos, los temas o los personajes y según cómo es su intervención en la trama.
- Narrador protagonista. Es el personaje principal y utiliza la primera persona para relatar la historia. Por eso, los hechos se cuentan de manera subjetiva, es decir, se incluyen las opiniones, sentimientos e intenciones de este personaje, pero no se mencionan los pensamientos y sentimientos del resto. Puede suceder que este narrador no conozca algunos hechos del relato.
- Narrador omnisciente. No participa en la historia y relata los acontecimientos en tercera persona y de manera objetiva. Además, sabe todo lo que sucedió y cuáles son los sentimientos, pensamientos e intenciones de los distintos personajes.
- Narrador testigo. Utiliza la tercera persona y, en algunos casos, la primera persona para relatar los acontecimientos. Es un personaje de la historia, pero nunca es el protagonista, ya que solo observa o los hechos que le ocurrieron a otros personajes. Existen tres tipos de narrador testigo:– Testigo impersonal. Narra acontecimientos que presenció, pero en los que no participó. Se suele contar la historia en presente.– Testigo presencial. Es un personaje secundario que narra desde su perspectiva los hechos en los que participaron otros personajes o en los que tuvo poca intervención.– Testigo informante. Narra lo sucedido como si estuviera transcribiendo los hechos o la información a un documento oficial.
- Narrador observador. Relata la historia en tercera persona y de manera objetiva, es decir, que no opina sobre lo acontecido. No participa en la trama y solo puede contar aquello que se percibe con los sentidos, por eso, no hace mención de los pensamientos, intenciones y sentimientos de los personajes.
- Narrador equisciente. Relata la historia en tercera persona y se centra en contar lo que le ocurrió y lo que sabe un solo personaje, sobre el que cuenta sus pensamientos, sus sentimientos y sus intenciones. Sobre el resto de los personajes solo puede hacer conjeturas.
- Narrador múltiple. Se combinan y alternan varios narradores que cuentan una misma historia, es decir, los hechos se relatan desde múltiples perspectivas.
- Narrador enciclopédico. Relata hechos o explica teorías o conceptos en tercera persona y de manera objetiva e imparcial. Este narrador no se utiliza en textos literarios, sino en textos científicos o académicos, como enciclopedias o manuales escolares.
Ejemplos de narrador
- Narrador en primera persona – Autobiografía, de Agatha Christie
Una de las mejores cosas que le pueden tocar a uno en la vida es una infancia feliz. La mía lo fue. Tenía una casa y un jardín que me gustaban mucho, una juiciosa y paciente nodriza, y por padres dos personas que se amaban tiernamente y cuyo matrimonio y paternidad fueron todo un éxito.
Mirando hacia atrás, veo que el nuestro era un hogar feliz, gracias, en gran parte, a mi padre que era un hombre muy complaciente. En nuestros días no se da mucha importancia a esta cualidad. Se suele preguntar si un hombre es inteligente e industrioso, si contribuye al bienestar común, si tiene influencias.
- Narrador en segunda persona – Memorias póstumas de Brás Cubas, de Joaquim Machado de Assis
Retén esta expresión, lector; guárdala, examínala, y si no llegas a entenderla, puedes concluir que ignoras una de las sensaciones más sutiles de ese mundo y de aquel tiempo.*
*En muchas partes de este libro, se utiliza la segunda persona para hablarle al lector, pero la mayoría de la novela está narrada en primera persona.
- Narrador en tercera persona – Ilíada, de Homero
- Narrador protagonista – David Copperfield, de Charles Dickens
Si soy yo el héroe de mi propia vida o si otro cualquiera me reemplazará, lo dirán estas páginas. Para empezar mi historia desde el principio, diré que nací (según me han dicho y yo lo creo) un viernes a las doce en punto de la noche. Y, cosa curiosa, el reloj empezó a sonar y yo a gritar simultáneamente.
Teniendo en cuenta el día y la hora de nacimiento, la enfermera y algunas comadronas del barrio (que tenían puesto un interés vital en mí bastantes meses antes de que pudiéramos conocernos personalmente) declararon: primero, que estaba predestinado a ser desgraciado en esta vida, y segundo, que gozaría del privilegio de ver fantasmas y espíritus.
- Narrador omnisciente – “Las ruinas circulares”, de Jorge Luis Borges
El forastero se tendió bajo el pedestal. Lo despertó el sol alto. Comprobó sin asombro que las heridas habían cicatrizado; cerró los ojos pálidos y durmió, no por flaqueza de la carne sino por determinación de la voluntad. Sabía que ese templo era el lugar que requería su invencible propósito; sabía que los árboles incesantes no habían logrado estrangular, río abajo, las ruinas de otro templo propicio, también de dioses incendiados y muertos; sabía que su inmediata obligación era el sueño. Hacia la medianoche lo despertó el grito inconsolable de un pájaro.
- Narrador testigo impersonal – La colmena, de Camilo José Cela
La mujer se va por la acera, camino de la plaza de Alonso Martínez. En una ventana del Café que hace esquina al bulevar, dos hombres hablan. Son dos hombres jóvenes, uno de veintitantos y otro de treinta y tantos años; el más viejo tiene aspecto de jurado en un concurso literario; el más joven tiene aire de ser novelista.
- Narrador testigo presencial – El corazón de las tinieblas, de Joseph Conrad
Guardó silencio. Las llamas se deslizaban por el río, llamas pequeñas y de color verde, llamas rojas, llamas blancas, que se perseguían y que se alcanzaban, uniéndose, para luego cruzarse y separarse muy lentamente, o muy aprisa. El tráfico de la gran ciudad proseguía en una noche cada vez más densa, sobre un río que jamás dormía. Nos observábamos, esperando, pacientemente. No había nada que hacer mientras no cambiara la marea, pero solo después de un largo silencio, al decir Marlow, con vos vacilante, “Supongo, camaradas, que recordaréis que en cierta ocasión probé suerte como marino de agua dulce”, nos dimos cuenta de que estábamos condenados a escuchar, antes de que la corriente comenzara a descender, otra de sus experiencias ambiguas e inconclusas historias.
- Narrador testigo informante – El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha, de Miguel de Cervantes Saavedra
Cuando yo oí decir «Dulcinea del Toboso», quedé atónito y suspenso, porque luego se me representó que aquellos cartapacios contenían la historia de don Quijote. Con esta imaginación, le di priesa que leyese el principio, y, haciéndolo ansí, volviendo de improviso el arábigo en castellano, dijo que decía: Historia de don Quijote de la Mancha, escrita por Cide Hamete Benengeli, historiador arábigo. Mucha discreción fue menester para disimular el contento que recebí cuando llegó a mis oídos el título del libro; y, salteándosele al sedero, compré al muchacho todos los papeles y cartapacios por medio real; que si él tuviera discreción y supiera lo que yo los deseaba, bien se pudiera prometer y llevar más de seis reales de la compra. Apartéme luego con el morisco por el claustro de la iglesia mayor, y roguéle me volviese aquellos cartapacios, todos los que trataban de don Quijote, en lengua castellana, sin quitarles ni añadirles nada, ofreciéndole la paga que él quisiese. Contentóse con dos arrobas de pasas y dos fanegas de trigo, y prometió de traducirlos bien y fielmente y con mucha brevedad; pero yo, por facilitar más el negocio y por no dejar de la mano tan buen hallazgo, le truje a mi casa, donde en poco más de mes y medio la tradujo toda, del mesmo modo que aquí se refiere.
- Narrador observador – “El matadero”, de Esteban Echeverría
Sucedió, pues, en aquel tiempo, una lluvia muy copiosa. Los caminos se anegaron; los pantanos se pusieron a nado y las calles de entrada y salida a la ciudad rebosaban en acuoso barro. Una tremenda avenida se precipitó de repente por el Riachuelo de Barracas, y extendió majestuosamente sus turbias aguas hasta el pie de las barrancas del alto. El Plata creciendo embravecido empujó esas aguas que venían buscando su cauce y las hizo correr hinchadas por sobre campos, terraplenes, arboledas, caseríos, y extenderse como un lago inmenso por todas las bajas tierras. La ciudad circunvalada del Norte al Este por una cintura de agua y barro, y al Sud por un piélago blanquecino en cuya superficie flotaban a la ventura algunos barquichuelos y negreaban las chimeneas y las copas de los árboles, echaba desde sus torres y barrancas atónitas miradas al horizonte como implorando misericordia al Altísimo. Parecía el amago de un nuevo diluvio.
Temáticas abordadas: El texto escrito
¿Qué es un texto?
Se entiende por texto una composición ordenada de signos inscritos en un sistema de escritura, cuya lectura permite recobrar un sentido específico referido por el emisor. La palabra texto proviene del latín textus, que significa “tejido” o “entrelazado”, de modo que en el origen mismo de la idea del texto se encuentra su capacidad para contener ideas en un hilo o una secuencia de caracteres.
De ese modo, todo texto contiene una serie de mensajes cifrados que el lector debe poder recuperar, y que puede ser de diversa índole, conforme a los cometidos expresivos de quien lo redactó: son textos las instrucciones de uso de una lavadora, pero también un poema de amor, las noticias del diario o un grafiti de protesta en una pared en la calle.
De modo que un texto viene a ser una cantidad de enunciados hilados entre sí y ordenados en base a un argumento (explicativo, narrativo, descriptivo, etc.), empleando para ello un sistema concreto de signos, que llamaremos lenguaje, y dentro de dicho sistema un código concreto que llamaremos lengua.
De ese modo, todo texto contiene una serie de mensajes cifrados que el lector debe poder recuperar, y que puede ser de diversa índole, conforme a los cometidos expresivos de quien lo redactó: son textos las instrucciones de uso de una lavadora, pero también un poema de amor, las noticias del diario o un grafiti de protesta en una pared en la calle.
- Cohesión. Un texto cohesionado es aquel cuyas partes se encuentran unidas lógicamente entre sí, o sea, que de la lectura de una parte se puede ir a la siguiente de manera ordenada, racional. La falta de cohesión hace que los textos salten de una cosa a otra, sin ton ni son.
- Coherencia. Los textos deben ser coherentes, lo cual significa centrarse en un tema o tópico sobre el cual van a referirse, sea el que sea. Un texto debería avanzar de a poco hacia la composición de una idea global, general, a través de la exposición de ideas más pequeñas o sencillas. Pero al final de la lectura de un texto coherente, uno puede explicar “de qué trata”.
- Significado. Todo texto posee un significado a recuperar por el lector, incluso en los más banales o ineficientes. Pero la escritura nunca carece de significado, pues no tendría nada que comunicar y la lectura sería imposible.
- Progresividad. Un texto ofrece su contenido de manera progresiva, es decir, poco a poco, una oración a la vez. Por eso para saber todo lo que dice debemos leerlo todo, pues a medida que avanzamos en la lectura vamos descifrando más y más del contenido de su mensaje, y si nos conformamos con la primera parte, no lo sabremos todo.
- Intencionalidad. Todo texto es escrito con alguna intención comunicativa, o sea, con algún propósito en mente, ya sea servir de recordatorio, decirle a otra persona que haga algo, o simplemente entretener. Sea como sea, dicha intención configurará el texto y hará que el emisor emplee unos u otros recursos en su composición.
- Adecuación. Todo texto debe adaptarse a una serie de códigos y preceptos que sean comunes con su receptor, de manera que éste pueda entenderlo y descifrar su contenido. Esto pasa por el modo de uso del lenguaje, también por las convenciones del género, etc.
Temáticas abordadas: La coherencia textual
La coherencia es la propiedad del texto que permite que sea interpretado como una unidad de información, percibida de una forma clara y precisa por el receptor. La coherencia se construye mediante la selección y organización de la información, y por el conocimiento que comparten el emisor y el receptor sobre el contexto o la realidad que les rodea.
Es decir:
- Selección de la información. Elegimos lo que queremos decir o escribir y lo que no, teniendo en cuenta el tema del que tratamos y lo que pretendemos comunicar.
- Organización de la información. Tenemos muchas ideas en la cabeza, pero, después de seleccionar lo necesario, hay que organizarlo de alguna manera para que el o los receptores de nuestro texto comprendan qué queremos transmitir.
Para conseguir la coherencia textual hay que tener en cuenta:
• La unidad temática. Todos los enunciados giran en torno a un tema, es decir, se relacionan unos con otros y no debe haber contradicciones.
Observa el siguiente texto:
* El día comenzó con un cielo despejado. Había todavía charcos de agua de la lluvia del día anterior. La carretera estaba desierta y la chica abrió su bolso y sacó la llave. Nadie sabía qué ocurría en la casa. Había algunas nubes, pero el ladrón siguió trepando por la pared. Así que terminé la cena y me puse a ver la tele.
Como es evidente, carece de unidad temática porque resulta imposible identificar de qué trata: ¿Un parte meteorológico? ¿Una mujer perdida en una carretera? ¿Una historia de misterio? ¿Un robo? ¿Un día en la vida de un adolescente?
• Una estructura interna lógica. Las ideas aparecen ordenadas y jerarquizadas; deben seguir algún criterio de ordenación, por ejemplo, hay ideas más generales o importantes que otras.
• Corrección gramatical y léxica. Se consigue mediante:
- El significado apropiado de las palabras: no debe haber contradicción entre el significado de las distintas palabras que aparecen relacionadas.
- El uso correcto de nexos y enlaces oracionales: estos elementos tienen como función unir palabras u oraciones (conjunciones, preposiciones, locuciones).
- La ausencia de expresiones incoherentes, denominadas anacolutos: consisten en la falta de coherencia en la construcción sintáctica de los elementos de una oración (sujetos falsos, errores de concordancia, incorrecciones léxicas, etc.) Se consideran anacolutos las construcciones del tipo:
Sujeto falso: * Yo me parece que no voy a ir1.
La forma correcta es: A mí me parece que no voy a ir. ( Y "a mí" no es el sujeto, porque no concierta con el verbo en persona.)
Errores de concordancia: * En la fiesta hubieron muchos invitados.
Lo correcto es: En la fiesta hubo muchos invitados.
* A tus amigos le gusta el fútbol.
Debe decirse: A tus amigos les gusta el fútbol.
Incorrección léxica: * La fotosíntesis es cuando una planta utiliza la energía de la luz para transformar la materia inorgánica en materia orgánica.
Se debe decir: La fotosíntesis es el proceso por el que una planta utiliza la energía de la luz para transformar la materia inorgánica en materia orgánica.
Podemos resumir lo que hemos dicho con el siguiente cuadro:
COHERENCIA Textos orales y escritos | |||
INFORMACIÓN | TEMA | ESTRUCTURA | CORRECCIÓN |
|
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Semana 13
Temáticas abordadas: La cohesión textual
Cassany (1995) explica que la cohesión textual es el hilo que permite a las perlas de un collar estar unidas. La cohesión se establece gracias al uso de los signos de puntuación, las conjunciones, conectores… La cohesión es importe en el texto porque de esta manera logramos que nuestro mensaje se transfiera de manera completa al destinatario. Por el contrario, si un texto no presenta buena cohesión textual se arriesga a que sea confuso y su mensaje se pierda.
Una manera de tener una buena cohesión textual es evitar la repetición de una misma palabra tanto como sea posible. La mejor forma de hacer esto es mediante el uso de los siguientes usos cohesivos:
Función | Ejemplos de palabra |
Adición | Además, y, también, de la misma manera |
Separación | o, u, también |
Oposición | Por el contrario, en cambio, sino, sino que |
Causa | Puesto que, ya que, porque |
Comparación | Como, más xxxx que, menos xxxx que |
Tiempo | Finalmente, previamente, para finalizar, después |
Condicional | Si, con tal que, solo si |
Espacio | En el medio, a la derecha, en el fondo |
Limitación | Pero, aunque, no obstante, sin embargo, mas |
Ejemplos:
- Aviso a los clientes: este establecimiento para su tranquilidad utiliza productos que no han sido probados en animales (no queda clara si la tranquilidad es del cliente o del establecimiento).
- José está satisfecho con la comida, y yo lo mismo (Estoy satisfecho por José o por la comida que yo consumí).
- Él estudió toda la noche para el examen, incluso, no lo aprobó. (Aquí se pierde el sentido de la frase por el mal uso del conector que debería ser: pero).
- ¿Juan cómo estás? (En este ejemplo se puede ver que la oración pierde el sentido a causa de la falta de la coma vocativa. Uso correcto: ¿Juan, cómo estás?)
El buen uso de la cohesión textual depende del conocimiento de las reglas gramaticales de la lengua y de la intención comunicativa que tiene el escritor.
Referencias
Cassany, D. (1995). La cocina de la escritura. Barcelona: Anagrama
EL TEXTO EXPOSITIVO
¿Qué es un texto expositivo?
El texto expositivo es aquel texto que ofrece al lector una información explícita sobre un tema puntual, de manera objetiva, es decir, sin que medie en ningún momento la opinión del autor o sus posicionamientos. En consecuencia, tampoco necesita utilizar argumentaciones para convencer.
La intención única de los textos expositivos es la de agotar el tema, es decir, transmitir al lector una información. Comúnmente, los textos expositivos se circunscriben al asunto que abordan, sin ir más allá y sin echar mano a contenidos emotivos.
Características de un texto expositivo
Los textos expositivos se caracterizan por lo siguiente:
- Transmiten información, pues tienen como único fin el de comunicar al lector un conocimiento específico, independientemente del tema abordado.
- Aspiran a la objetividad, es decir, no proponen un punto de vista ni lo defienden mediante argumentos de ningún tipo, pues no buscan convencer, sino aportar información.
- Pueden emplear figuras retóricas y otros mecanismos para presentar de manera más eficiente su contenido, siempre y cuando eso no empañe su claridad y precisión.
- Suelen utilizar un registro formal, con oraciones en presente intemporal y modo indicativo.
- Pueden incluir explicaciones, ejemplos, resúmenes y otras estrategias para jerarquizar la información y ayudar al lector a comprenderla.
Tipos de texto expositivo
Los textos expositivos se clasifican en dos grupos, dependiendo del lector al cual están dirigidos, es decir, a qué tipo de público apuntan:
- Textos expositivos divulgativos. Son aquellos que están dirigidos a un público amplio, sin requerimientos previos especializados, y, por lo tanto, abordan temas de interés general, usualmente desde una perspectiva relativamente simple. Sus oraciones tienden a ser breves y fáciles de comprender, y su lenguaje es llano y accesible.
- Textos expositivos especializados. Son aquellos que están destinados a un público reducido y especializado, ya que manejan un lenguaje técnico, complejo o exigente para el lector. El público ideal de estos textos son los entendidos en la materia, o sea, aquellos que poseen conocimientos previos adquiridos mediante el estudio y la formación en el tema.
PAUTAS DE EVALUACIÓN:
Realizar el siguiente
taller, escrito a mano en hojas de block tamaño carta, bien presentado
y completo.
El taller tiene valor de
dos notas
La parte escrita y la
sustentación. Se deben aprobar ambas notas para pasar la sustentación.
I PARTE: LECTURA
INFERENCIAL
Texto # 1
Masa
César Vallejo:
Al fin de la
batalla, y muerto el combatiente,
vino hacia él un hombre
y le dijo: «No mueras, te amo tanto!»
Pero el cadáver ¡ay!
siguió muriendo.
Se le acercaron dos y
repitiéronle:
«No nos dejes!
¡Valor! ¡Vuelve a la vida!»
Pero el cadáver ¡ay! siguió
muriendo.
Acudieron a él veinte,
cien, mil, quinientos mil, clamando:
«Tanto amor, y no poder
nada contra la muerte!»
Pero el cadáver ¡ay!
siguió muriendo.
Le rodearon millones de
individuos, con un ruego común:
«¡Quédate
hermano!» Pero el cadáver ¡ay! siguió muriendo.
Entonces, todos los
hombres de la tierra le rodearon;
les vio el cadáver
triste, emocionado;
incorporóse
lentamente,
abrazó al primer hombre;
echóse a andar.
Responde de acuerdo a la
lectura del poema anterior:
1. Qué es la guerra según
el poema
2. Qué significa morir
3. Explique la actitud
de los hombres de guerra
4. Según el poema, por
qué revivió el hombre.
5. Qué enseñanza se
puede deducir del texto
II PARTE: TÉCNICAS
NARRATIVAS
1. Explique los
siguientes tipos de narradores:
- Narrador
omnisciente
- Narrador en primera
persona
- Narrador testigo
- Narrador en
tercera persona
2. Realice dos
ejemplos de cada uno
3. Explique los
tipos de finales que se utilizan en los textos, según lo visto en clase.
4. Lectura del texto narrativo: ¿Fue un sueño? de Guy Maupassant, para leerlo, puede copiar y pegar el siguiente link
¿Fue un sueño? de
Guy Maupassant
https://biblioteca.org.ar/libros/1687.pdf
Responda de
acuerdo a la lectura del texto:
1. Qué tipo de
narrador tiene el texto de Maupassant. Explique y sustente su respuesta.
2. Qué tipo de final
tiene el texto. Sustente su respuesta
3. Describa los
personajes centrales del texto. Analice los apsectos físicos y psicológicos
4. ¿Qué sucede al final
de la historia? Analice el final
5. Qué significa morir
en el texto
III PARTE:
COMPRENSIÓN DE LECTURA
Realizar la lectura del
texto: "El hombre de arena” de Hoffman
Responde las preguntas
de acuerdo al texto:
- ¿Cuál es el significado
simbólico del hombre de arena en la historia?
- ¿Cómo reaccionan los niños ante
las acciones del hombre de arena?
- ¿Cuál es el papel de la mujer,
qué significa Olimpia en la historia?
- ¿Qué papel juegan los adultos
en la historia en relación con los niños?
- ¿Cómo cambia la percepción de
los niños sobre el hombre de arena a lo largo de la historia?
- ¿Qué mensaje transmite la
historia sobre la relación entre la realidad y la fantasía?
7.
Realice una descripción física y
psicológica de los personajes centrales de cada texto
IV PARTE:
REDACCIÓN
Explique qué es
coherencia y cohesión textual
2. Cómo
se logra la coherencia y la cohesión textual
3. Qué
son los conectores y cuál es su función
4. Realice
tres ejemplos de cohesión y tres ejemplos de coherencia
5. Redacte un
texto que tenga temática: "La libre expresión" aplicando la
coherencia y la cohesión y señale los elementos cohesivos utilizados. Utilice
mínimo 15 conectores
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